Englobaremos bajo este epígrafe las obras de arquitectura del siglo XX, comenzando por algunos edificios que siguen la estética modernista, como la casa de Pedro Martínez, en la Plaza del Jardín, junto a la iglesia. En la misma plaza se ubica el antiguo Casino Principal, de estética más sobria.
Poco más allá, saliendo a la Avenida Laviaga Castillo, encontramos el colegio Florián Rey, levantado en 1930 siguiendo la estética de los palacios renacentistas aragoneses. En forma de U y rematado por dos torreones, sus paredes son de piedra de Calatorao y ladrillo caravista. Tiene zócalo de sillería, cubierta a cuatro aguas de teja árabe y alero sobresaliente de madera. Su estética es similar a la de otros colegios aragoneses levantados en las mismas fechas, como el de Uncastillo o Sádaba.
El Matadero Municipal fue proyecto del arquitecto Enrique Bas Agustín en 1959, e inaugurándose tres años después, en 1962. Es un edificio funcional, con un torreón, que se desarrolla en su parte trasera en un patio abierto alrededor del cual se distribuyen las estancias. En la actualidad, perdido su uso original, acoge la oficina agroambiental del Gobierno de Aragón y el Espacio Jóven de la localidad.
Otro edificio singular es el Cine Salón Blanco, ubicado junto a la iglesia de La Asunción. Edificado a mediados del siglo XX, exteriormente se confunde entre otras dependencias de la parroquia. Es en su interior donde se abre una gran sala con unas 500 butacas que, adquirida recientemente por el consistorio, está pendiente de remodelarse para adaptarse a las necesidades actuales.